el pasado jueves decidimos, mi amor y yo salir a tomarnos unas copas. Hacía bastante tiempo que no salía un jueves, primero por el trabajo y después por enfermedades.No me defraudo. Una buena cena, un buen vino y después copa. Estábamos en un afamado bar de copas de esta ciudad nuestra y al principio bastante pobre de gente y personas, pero a la hora empezó a llenarse de personajillos petados y reinas con faltas cortas, claro, que tonto, los jueves hay baile. Aparece un maromo de pelo largo y largo bigote, se coloca el micro inalámbrico (wifi?) y se sube a un estrado y de repente como en los musicales, toda la gente que formaba un tumulto desordenado se pone a bailar siguiendo los pasos del leader. Siempre me ha llamado la atención los musicales porque la gente de aparente desorden pasaban a una estudiada coreografía y después de acabar el número cada uno se iba por su lado de lo más sonco, como si no hubiera ocurrido nada. Me hizo mucha gracia distinguir de entre los fornidos y ceñidos bailarines a mi amigo Abel. Lucia calva impecable, camiseta negra-marcapezones y pareja de baile de igual condición. Por si hubiera dudas a la primera frase que intercambiamos me quedo claro que "solo pareja de baile"(falda negra con raja, poco cuello, caderas marcadas y brazos de albañil).
Parece ser que existe un club sin asociación que se juntan los jueves a las 12 sin orden establecido hasta que "José" guro del baile sube al estrado y convierte a las ordas de borrachos en un ejercito de bailarines adiestrados y obedientes. Cunado José baja de del estrado toda la magia desaparece, como en los musicales.
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